TENGO UN TANGO

El poeta siempre vuelve, aunque sea con la frente marchita y los abusos hayan plateado el tabique nasal.
Estoy trabajando sobre el tango: fórmula lírica, existencial, sentimental y social de alcance brutal...
TANGO, TANGO, TANGO, VOS QUE FUISTE TAN AMIGO, CONFIDENTE DE MI AMOR,
AHORA PRECISO DE TU AYUDA PAR CALMAR MI DOLOR


tango I
golpeando, golpeando las puertas del bar
13 de junio de 2007, bobito Dylan, prócer de la poesía, es nombrado Príncipe de Asturias de las Artes

y decís que me mato y me maltrato
pero a nadie yo lastimo
si me coloco, si me enloco y me encurdelo
para olvidarme ya de ti

pero qué importa a nadie
que pase la vida apoyado en el mostrador
si lo que quiero olvidar el recuerdo peor de ti
sin mentir, sin sentir, sin sufrir

si pensara que no pudiera con tu prisa
vos estará engalanada con mis perfumes
repiqueando tus tacones por la calle feria
y tu silueta tan porteña
aclamada en los cafés y en las peñas
y el rouge hará versos con tu sonrisa

retomé lo peor
tomé veneno por licor suave
bebí mi vino como jarabe

reloco y recuerdo,
recodeo por mi melancolía
retomo y recaigo
recargo mi pistola y apunto al corazón

recibiste mis misivas
reviré en mis asuntos
recalaste en lo mas hondo
y repuse el alma en el fondo de esta copa

relamí mis penas
rematadamente loco
me enfadé con la tristeza

y todo esto ya lo se
que veinte años no son nada
que el siglo XXI fue y sera una porquería
que eso ya lo se

que el arrabal lo tengo en mis ansias
que caigo y me recaigo
en la alegría de mi barrio
cantando y encantado por el tango

y volví
con las nieves del tiempo
y viví
con mis deudas y mis dudas
de mi pobre corazón

con este tango
que es burlón y compadrito
araño cada segundo de vida
y volví con la t-shirt marchita

podrían acusarme
de ser un loco de remate
podrás denunciarme
que ya ni invito
a mis amigos
ni siquiera los domingos

en una tarde de lluvia
sin en el trajín del ir y venir
viví sin freno
si me mata el recuerdo
de cuando decía "te quiero"

tango,
tango,
tango
cuando
yo te canto
recuerdo
el encanto
de vivir

que mi apodo es Antucho Barbosa
hay unos versos que rezongan
en el barrio, barrio, barrio

ya los besos he perdido
ya los amigos he sentido
ya en los bares he vivido
ya los males he reído
con este tango maldito

en la noche queda la suerte
en el mate hundí mis penas
y sentí la muerte
en el acecho de tus caderas

gasté mi fortuna
me hice maula
sólo me queda la noche
sola se queda la luna

fui antiguo, fui moderno
vestía como un gangster
corbata en el pescuezo
y mi traje negro
de noctámbulo vividor

en tu mirada endomingada
perdí mi suerte
vos que sos peor que un trago amargo
acepta siquiera este humilde tango
y siempre queda un feliz encuentro
y siempre nos queda el arrebato
y cantarás estos versos en tu pobre cuarto
y gritarás mi nombre por las calles
y me moriré de puro guapo