DOMINGO A LAS 8.00 A.M. (SIN RESACA)

Y ver pasar un camión de mudanzas
tristes tópicos
pasear bajo la sombra alargada de edificios raros
hay caminos de mi lado más oscuro
acaso más bello que un atardecer
un kiosko: revistas de papel couché y el periódico viejo de hoy
un zumo de naranja, dos cafés, tres bostezos... mil cigarrillos.

el camión de mudanzas,
un colchón  en la basura,
un perro que madruga
como un pintor de nubes

no hay gatos, ni hay noches
ni caminos a la playa
ni ojos azules

en algún rincón del mundo,
en una mesa de un café,
en cientos de canciones cortas,
en una cama sin dueño,
en la sonrisa de un camarero:
donde vivo un poco cada día